Aceptar la diferencia pero no la mezcla
País de: aceptar la diferencia pero no la mezcla
Actualmente se puede apreciar la convivencia de distintas tribus urbanas dentro del país: otakus, indies, turros, tinchos y milipilis, entre muchos más. Tener una gran presencia de tribus en el país es un reflejo de su realidad. Segmentamos en la búsqueda de un grupo de pertenencia o en el intento de separarnos de quien no se parece a nosotros. Pero más que nada sentimos la necesidad de crear rígidos parámetros que nos den seguridad frente a una sociedad sumamente diversa que inconscientemente nos representa una amenaza.
Cada nueva tribu implica estereotipos, que están definidos como “imagen o idea aceptada comúnmente por un grupo y sociedad, con carácter inmutable y que actúa como modelo”. Esto se ve plasmado perfectamente ya que implícitamente se establece que si perteneces a una tribu urbana no podes pertenecer a otra y tampoco compartir costumbres, jerga, formas de vestimenta, lugares de concurrencia. Está aceptada la segmentación, a tal punto que todo debe llevar un nombre, se vuelve casi necesario el establecimiento de modelos; sin embargo, está mal visto el intercambio entre ellos y, por lo tanto, la pérdida de su supuesta pureza.
Más allá de las valoraciones positivas o negativas ligadas a cada tribu, la aparición de una nueva, aislada, rígida y cerrada no asusta tanto como la posibilidad de que dos o más se mezclen entre sí. Las redes sociales son un gran reflejo y fomento de todo esto: en tiktok las milipilis y tinchos son altamente juzgados por bailar o utilizar canciones más bien turras. Sucede lo mismo si los turros usan vestimentas de tinchos o milipilis. Los usuarios de las redes se encargan de hacer notar lo incorrecto de sus acciones: comentarios negativos, burlas, parodias, memes.
Aquellas son tan solo algunas de las muchísimas manifestaciones que se pueden dar por distintos medios para mantener el status quo, el orden por el cual hay grupos considerados superiores y otros inferiores, por el que algunos “tienen onda” y otros “dan vergüenza”. Por lo tanto, si se combinan elementos de ambos, ¿cómo debe sentirse la gente?, ¿qué está de moda entonces?, ¿a dónde pertenece la gente?, ¿dónde se refugia?
Comentarios
Publicar un comentario